lunes, 15 de mayo de 2017




         
         


               Las Tormentas


Una tormenta es un fenómeno caracterizado por la coexistencia próxima de dos o más masas de aire de diferentes temperaturas. Este contraste asociado a los efectos físicos implicados desemboca en una inestabilidad caracterizada por lluvias, vientos, relámpagos, truenos, rayos y ocasionalmente granizos entre otros fenómenos meteorológicos.

Medidas de protección:

·         Observar si el cielo se oscurece, si pueden verse relámpagos, si el viento arrecia o si se escuchan truenos. En tal caso conviene dirigirse inmediatamente a un lugar seguro.
·         No asomarse al balcón o ventanas abiertas para observar la tormenta.
·          Cerrar puertas y ventanas para evitar corrientes de aire pues éstas atraen los rayos.
·         En caso de hallarnos en un piso o vivienda, hay que desconectar ,los electrodomésticos, y las tomas de antena de televisión, ya que el rayo puede entrar por las conducciones de electricidad y TV causando daños o la destrucción de estos objetos. Conviene permanecer alejados de las tuberías del agua y del gas y del teléfono o PC. Todos estos objetos pueden conducir la electricidad y provocar electrocución. Dejar las luces encendidas, sin embargo, no aumenta el riesgo.
·         Hay que postponer los baños, las duchas y el lavado de la vajilla o usar agua corriente para cualquier otro propósito hasta que la tormenta haya pasado porque a través del agua existe también riesgo de electrocución.
·          Una buena manera de aislarse es sentarse en una silla que no sea de metal apoyando los pies en la mesa u otra silla que tampoco sean metálicas.
·         En verano tratar de acabar de ascender a una cumbre o terminar una salida o etapa antes de las cuatro de la tarde; a partir de estas horas es cuando se forma el mayor número de tormentas.
·          Desistir de hacer cumbre o terminar una ruta en el caso de que veamos formarse un cumulonimbo en clara progresión hacia la tormenta y en la dirección en la que nos dirigimos.
·         En caso de sentir un cosquilleo en la piel, que se eriza el cabello y que los objetos metálicos o que terminan en punta metálica emiten un extraño zumbido parecido al de una colmena y se producen chispas o destellos la tormenta está próxima. Todos estos fenómenos se producen por el desplazamiento de las cargas eléctricas que generan las tormentas y significa que el aire en el que nos encontramos se ha vuelto conductor hasta el punto de que en ocasiones entre dos excursionistas cercanos entre sí y sin tocarse puede producirse una molesta descarga.







 Numero de tormentas en España en un año: 

 El número exacto de tormentas que se producen en España es imposible determinarlo (ya hemos comentado que sigue habiendo escasez de observación), sin embargo, se han hecho cálculos estimativos que dan como resultado que en un año se producen en la Península Ibérica alrededor de diez mil; unas cinco mil de estas se desarrollan durante el verano, en torno a 2500 en primavera, aproximadamente 2000 en otoño y el resto, unas quinientas, en invierno.
Por último, señalaremos que más del 70% de los días del año se producen tormentas en algún lugar de España o lo que es lo mismo, más de 250 días de los 365 hay fenómenos tormentosos, de mayor o menor virulencia, en nuestro país.

 Resultado de imagen de tormentas



 

viernes, 5 de mayo de 2017

Experimento








                         Billete que no se quema



Qué necesitas:
  • 1 vaso con agua
  • 1 vaso con etanol (alcohol de farmacia)
  • 1 vaso vacío para hacer la mezcla
  • 3 trozos de papel 'tamaño billete'.
  • 1 billete de 5 € (no vaya a ser...)
  • Una pizca de sal
  • Unas pinzas de cocina (o de laboratorio si eres más 'pro', el fin es no quemarse al prender el billete)
  • Mechero


Pasos a seguir:
1. Con ayuda de las pinzas, coge un trozo de papel e introdúcelo primero en el vaso de agua. Coge el mechero e intenta prenderle fuego. Como verás, no hay combustión. Eso se debe a que el agua impide que el papel llegue a la temperatura de ignición necesaria para arder. Pero, ¿qué ocurre si añadimos una sustancia inflamable al juego?
2. Repite el paso anterior introduciendo el papel primero en el vaso de agua y luego en el del alcohol (con las pinzas eh!, que nos conocemos). Al prenderle fuego verás que esta vez sí arde. Lo primero que se prende es el etanol (ignición a 78ºC) que es inflamable. El agua es el que se encarga de 'proteger' al papel (impide que llegue a una temperatura superior a 100ºC y salga ardiendo).
3. Para darle más emoción al asunto, utiliza ahora el vaso vacío y el billete de 5 €. Haz una mezcla al 50% de agua y alcohol y añádele una pizca de sal (para que la llamarada sea más naranja y más vistosa). Impregna el papel de ese líquido, cógelo con las pinzas y ¡fuego! El billete debería arder hasta que se consuma el alcohol y después quedar intacto.


 Resultado de imagen de billete que se quema

Glóbulos Blancos



                              Glóbulos Blancos


Los leucocitos ,de ahí que también sean llamados glóbulos blancos, son un conjunto heterogéneo de células sanguíneas que son ejecutoras de la respuesta inmunitaria, interviniendo así en la defensa del organismo contra sustancias extrañas o agentes infecciosos (antígenos). Se originan en la médula ósea y en el tejido linfático. Los leucocitos son producidos y derivados de unas células multipotenciales en la médula ósea, conocidas como células madre hematopoyéticas. Los glóbulos blancos se encuentran en todo el organismo, incluyendo la sangre y el tejido linfoide.
Existen cinco diferentes y diversos tipos de leucocitos, y varios de ellos (incluyendo monocitos y neutrófilos) son fagocíticos. Estos tipos se distinguen por sus características morfológicas y funcionales.
El número de leucocitos en la sangre suele ser un indicador de enfermedad. El recuento normal de glóbulos blancos fluctúa entre 4 y 11 x 109/L, y suele expresarse como 4000-11 000 glóbulos blancos por microlitro. Conforman, aproximadamente, el 1% del volumen sanguíneo total de un adulto sano.Al aumento del número de leucocitos por arriba del límite superior se le llama leucocitosis, y al decrecimiento por debajo del límite inferior se le llama leucopenia.